Soc-FUNDAMENTOS DEL EST5ADO NACIONAL

FORMACION DEL ESTADO NACIONAL EN
AMERICA LATINA

MARCOS KAPLAN


CAPITULO V

ESTRUCTURA SOCIOECONOMICA,
PODER Y ESTADO



América Latina entra en la emancipación en condiciones de dependencia y subdesarrollo. La soberanía política formal no altera esta situación originaria. La estructura socioeconómica es respetada, consolidada y extendida por las clases dominantes criollas.

El predominio corresponde al sector agro exportador que abarca y enlaza a grupos de terratenientes y mineros, comerciantes y financistas urbanos, jefes políticos, militares y eclesiásticos, en estrecha alianza con las metrópolis y empresas extranjeras.

Las economías y las sociedades nacionales que se constituyen de manera más rápida y sólida son aquellas en las cuales las clases dominantes nativas logran controlar los recursos y sistemas productivos de bienes y las exportaciones que interesan al mercado internacional.

La hegemonía de la oligarquía tiene límites internos y externos, está limitada desde el exterior, los grupos extranjeros y sus Estados controlan el mercado mundial y por lo tanto la demanda y los precios de los productos exportables, así como el abastecimiento de importaciones, capital (inversiones y préstamos), tecnología y mano de obra inmigratoria. El apoyo externo es indispensable para el ejercicio del poder interno. En lo interno, se replantea y cuestiona su hegemonía por conflictos entre sus sectores componentes y con las clases dominadas.



EL REGIMEN DE LA TIERRA


La propiedad latifundista de la tierra, con su dominio monopolista de la mano de obra y otros recursos materiales y financieros, constituye la forma primordial de organización.

El latifundio coexiste con los minifundios individuales y comunales. Los latifundistas concentran la propiedad y el uso de la tierra, las aguas, los capitales acumulables y los créditos necesarios para la producción en gran escala. Controlan la oferta y demanda de mano de obra barata explotada en múltiples maneras: baja remuneración, trabajo gratuito, tierras arrendadas o entregadas en uso, usura, etc.


Los terratenientes exhiben en general un visible desinterés por el progreso, por las innovaciones tecnológicas, no tienen ni propensión empresarial ni son modernizantes, su interés se reduce a aprovechar las ventajas naturales. El latifundista de este modo, hace uso ineficiente de la tierra (monocultivo, subutilización del suelo), y de la fuerza de trabajo. Su capacidad competitiva internacional, se va reduciendo, a su interés por la obra pública que le interesa directamente : caminos, ferrocarriles, acompaña un absoluto desinterés por la infraestructura social (sanidad, educación).

Las rentas obtenidas las orienta a la adquisición de más tierras y al consumo suntuario, a la intermediación mercantil y a la usura, a la especulación inmobiliaria. Sus miembros, virtualmente no pagan impuestos, compensan la baja productividad con devaluaciones monetarias.

En la pirámide de la sociedad rural, los sectores intermedios carecen de relevancia, los minifundistas están intermediados por los terratenientes y comerciantes, y los políticos que los manipulan y utilizan.

La mano de obra se recluta sobre bases familiares más que individuales con el consiguiente alto número de familiares no remunerados.

El sindicalismo campesino tiene una lenta y accidentada evolución, a lo que contribuyen el aislamiento, el analfabetismo y la falta de conciencia, las condiciones de trabajo. La miseria y marginalidad refuerzan el poder y la autoridad de los grupos rurales dominantes.

A diferencia de lo ocurrido en el modelo clásico del capitalismo, faltan, escasean o carecen de importancia las ciudades pequeñas y medianas como eslabón intermediante entre las sociedades urbanas y rurales.


LA URBANIZACION


La incorporación de América Latina, a partir de la emancipación, y la aplicación del modelo de desarrollo hacia afuera, crean y conforman un proceso peculiar de urbanización. La emancipación tiene un origen y un carácter fuertemente urbano.





Los centros originarios del poder colonial, que ya sufren desde el S18 la declinación de la producción minera, y luego de la mano de obra disponible, se ven aislados de las nuevas corrientes de comercio y financiamiento, se estancan como centros productores y mercantiles.

El predominio latifundista opera en un sentido limitativo a la urbanización, lo que contribuye a la falta o escasés de ciudades pequeñas y medianas y de sectores sociales intermedios.

Al cerrárseles o limitárseles el camino al interior y a la tierra, los grupos urbanos se especializan en actividades comerciales y financieras y en la promoción de nuevas líneas productivas mercantiles y de servicios.

La urbanización avanza como parte de un crecimiento dependiente determinado por el comercio internacional y el financiamiento e inversión foránea.

Uno de los rasgos más importantes de éste proceso es el crecimiento de por lo menos una gran ciudad principal en cada país, dominante, casi siempre costera.

La concentración económica y demográfica rompe el equilibrio a favor de la gran ciudad, y hace que el gobierno opere y tome decisiones cada vez más en función de los intereses urbanos.

El crecimiento urbano es a la vez causa y efecto de la europeización. La gran ciudad actúa como eje de transmisión en la dependencia respecto al comercio, inversiones, transporte, etc. La europeización estimula el crecimiento urbano, la ciudad es sinónimo de progreso, civilización, el atractivo urbano crece.

Junto a los aspectos positivos de la urbanización, existen otros negativos, destruye la idiosincrasia, surge y se afirma el menosprecio hacia las poblaciones del interior, sus sectores campesinos y populares, el colonialismo cultural se va convirtiendo en rasgo central.

La gran ciudad adquiere un peso específico aplastante.

En la cumbre de la pirámide social urbana se ubican los grupos nacionales superiores, ligados a sus similares rurales y a los intereses extranjeros: banqueros, inversores, especuladores, terratenientes ausentistas, empresarios, industriales, dirigentes políticos, militares religiosos. Son estratos intercomunicados y recíprocamente influyentes que configuran una clase única : la oligarquía, que presenta las siguientes características fundamentales:

Casta cerrada, estructurada por la riqueza, la educación, el matrimonio, lazos de sangre, linaje. La oligarquía detenta así un poder homogéneo y fuerte,, generado y consolidado por la propia fuerza económica y el control directo e indirecto de resortes culturales, sociales e ideológicos.

Las capas medias de las ciudades reflejan el impacto de una urbanización dependiente y distorsionada, en la cual el sector terciario surge y predomina antes que aparezca un embrión significativo del sector secundario. Se integran con los grupos burocráticos, los militares, las profesiones libres clásicas (derecho, medicina, arquitectura), intelectuales, artesanado, pequeños y medianos empresarios del comercio y la manufactura. No alcanzan a constituir una clase social compacta, dotada de conciencia de si y para si y de homogeneidad política operativa,

En lo que respecta a las clases populares, debe señalarse la temprana existencia de masas urbanas, segregadas y marginales, en relación de tradicional dependencia hacia los grupos superiores, sin gran capacidad de articulación ni presión.


¿ DUALISMO ESTRUCTURAL O
DESARROLLO DEPENDIENTE,
DESIGUAL Y COMBINADO ?


Las diferencias existentes entre la sociedad rural y urbana ha llevado a la postulación de la teoría del dualismo estructural. De acuerdo a esa concepción, cada país de Latinoamérica está compuesto por dos sociedades, dos formaciones socio históricas: la rural y la urbana. La coexistencia constituye el dualismo estructural, en algunas versiones este dualismo es identificado como el conflicto entre el feudalismo y el capitalismo, en el cual el segundo debe anular al primero como pre requisito para el progreso.

La sociedad urbana es identificada como la modernización y el desarrollo capitalista. Su origen es post colonial y se vincula a la emancipación, la integración internacional, la urbanización y los comienzos de la industrialización. En ella predominan las relaciones de tipo secundario y los actos impersonales, racionales, utilitarios, con gran movilidad social y mayores posibilidades de adquirir y expresar status por el esfuerzo personal.

La superación del subdesarrollo será tarea exclusiva o predominante de los grupos urbanos.

Este esquema es criticable ante todo por la simplificación histórica y sociológica que le es inherente. Toda sociedad, es en diverso grado heterogénea, unas y otras corresponden a diversas etapas históricas pero siguen siendo al mismo tiempo contemporáneas, no están separadas por compartimentos estancos, coexisten, a menudo por largo tiempo.


Esta mezcla de elementos dispares configura el conjunto y determina en última instancia su nivel medio de desarrollo. Ambos polos de la sociedad integran un mismo proceso histórico.

Finalmente, parece más adecuado hablar de relaciones de colonialismo interno, en que una parte explota a la otra, y ambas resultan satelizadas en grado diferente por parte de la metrópoli. Esta relación supone integración mutua y excluye así la marginalidad recíproca.


PAUTAS CULTURALES E
IDEOLOGICAS


La oligarquía rural impone un sentido de idolatría a la tierra, como fuente y manifestación de riqueza, poder y rango. Manifiesta su desprecio por el trabajo manual, la técnica, el comercio, la industria.

Las élites y capas letradas de las ciudades, en parte asimilan las pautas culturales ideológicas de la aristocracia rural y en parte ejercen sobre ella una influencia modernizante y europeizante.

La ciudad opera como intermediaria entre el país y el mundo metropolitano, es agente de penetración extranjera. El cosmopolitismo cultural y la alienación ideológica hacia lo foráneo, terminan por prevalecer.

La civilización europea, y luego la norteamericana ejercen una fascinación hipnótica en los grupos altos y medios relativamente cultivados. La mentalidad del consumo predomina sobre la de producción. En definitiva emergerá una cultura importada sin solidez, coherencia ni sentido nacional.

Se adoptará el modelo de democracia aristocrática y autoritaria en lo político y de un extremo liberalismo en lo económico.

El papel de la iglesia como núcleo de intelectuales tradicionales requiere de una consideración especial. Como reliquia del pasado colonial, la iglesia conserva vitalidad y poder en el nuevo sistema, se alía con la oligarquía lo que no excluye enfrentamientos con oligarquías liberales.

El sistema educativo se configura bajo el signo de una contradicción: los líderes de la emancipación buscan crear una sociedad moderna lo que choca con las condiciones de dependencia, desarrollo desigual y régimen oligárquico.

La enseñanza universitaria se organiza y funciona para la oligarquía y el estrato superior de las capas medias, como instrumento de hegemonía en la sociedad civil y en el Estado que satisfaga además los módicos requerimientos de profesiones liberales.

La prensa se desarrolla bajo el estímulo de la integración internacional. Desde 1806 se comienzan a publicar diarios en número considerable.
La prensa está controlada de hecho por la oligarquía a la que pertenecen sus propietarios y redactores. Es necesaria para las luchas personales y de clanes en el seno de la propia oligarquía, y para combatir a los enemigos de aquella.


ESTRUCTURA Y DINAMICA DEL
ESTADO NACIONAL


Los primeros gobiernos revolucionarios terminan siendo desgastados y desplazados por la anarquía, el caudillismo y los regímenes autocráticos. Suprimieron la inquisición, el tributo indígena, el sistema jurídico de castas, limitan la esclavitud, restringen y redefinen funciones de audiencias y cabildos. Organizan los poderes del Estado y sus relaciones con la iglesia y con el nuevo ejército. deben finalmente reorientar las relaciones internacionales, definir una diplomacia y una política económica para los países vecinos.

El Estado comienza a estructurarse y a funcionar en condiciones de generalizado desequilibrio, emerge y se constituye a través de un lento y penoso proceso que se da con diferencia de ritmos, rasgos y personalidades entre los distintos países latinoamericanos.


CLASES Y FRACCIONES
DOMINANTES Y HEGEMONICAS


El sistema político institucional y el Estado se organizan por y para una economía agro-minera-exportadora, por y en beneficio de los grupos dominantes que la controlan y se benefician de su funcionamiento y expansión.

El sistema es expresión e instrumento de terratenientes, comerciantes, financistas, dirigentes políticos, etc. Los objetivos básicos del sistema político y del Estado son : la consolidación y extensión de la hegemonía y de la estructura socioeconómica en que aquella se basa; la creación de posibilidades para un crecimiento dependiente en régimen de economía liberal, para la incorporación al sistema internacional y para una modernización restringida.







LAS ALIANZAS


La clase o fracción hegemónica debe establecer una red de alianzas internas y externas dentro de un sistema político que permita combinar la satisfacción prioritaria de los intereses hegemónicos con cierta consideración y satisfacción de las demandas y presiones de los grupos dominantes secundarios e incluso de grupos dominados.


EL ORDEN POLITICO
INSTITUCIONAL
CONSTITUCION Y FUNCIONAMIENTO



Para la construcción del orden político institucional se importa el modelo europeo y norteamericano de soluciones políticas, instituciones, textos constitucionales y legales.

Un Estado independiente, centralizado, basado en la soberanía popular y la democracia representativa. Se identifica el liberalismo político con el económico.

El modelo es importado y adoptado más como fórmula mágica que como método autónomo y creativo, no es el resultado de transformaciones socio económicos, políticas. Las capas medias son débiles y dependientes, las mayorías populares están sometidas a condiciones de expoliación, atraso y marginalidad.

El modelo ideológico y las formas institucionales, chocan con las estructuras y prácticas reales. Las constituciones, las leyes, las instituciones, se formulan y se acatan, pero no se cumplen.

El poder real sigue concentrado en manos de minorías restringidas. El ejercicio del poder social y político está monopolizado. La participación popular es inexistente o muy limitada.

La soberanía territorial del Estado va siendo reconocida pero sus limitaciones subsisten. Su autoridad se va borrando a medida que pretende ejercerse sobre regiones alejadas del centro.

La integración nacional no se completa, la centralización político administrativa permanece inacabada y vulnerable.

La oligarquía agro urbana, no comparte el poder con ningún grupo ajeno. El dominio político de la oligarquía se ve favorecido por la inexistencia de partidos con programas principistas, amplia organización y ancha base. Los existentes, oficialistas u opositores son partidos de notables lo que limita el surgimiento de nuevas élites políticas.

Las pujas entre grupos oligárquicos pueden desarrollarse sin que ello repercuta en la estabilidad del sistema. La corrupción política y administrativa, el favoritismo, el nepotismo, la arbitrariedad son la regla general y se dan por descontadas.

Todas las constituciones establecen un poder judicial independiente, cuya organización se inspira en el modelo norteamericano, pero aplica sistemas jurídicos europeos.

En algunos países: México, Argentina, Colombia, Venezuela, Brasil, adoptan el sistema federal como forma de armonización y equilibrio entre los particularismos locales y la vigencia de un Estado nacional unificado. El federalismo formal va evolucionando hacia la centralización y el unitarismo de hecho.

Los textos constitucionales tienen declaraciones enfáticas de derechos y garantías individuales, estas sin embargo se refieren a las instituciones del capitalismo liberal, no se aplica en caso nada a las relaciones entre élites y masas.


COACCION SOCIAL

Dentro de la función estatal de coacción social se destacan dos aspectos : creación del aparato administrativo y el papel de las fuerzas armadas.

Los primeros jefes militares son idealistas y/o ambiciosos de élites urbanas. La prolongada guerra emancipadora y las posteriores luchas civiles crean combatientes profesionales divorciados de la vida y actividades civiles.

Los militares, carentes de ideología coherente, reemplazan sus lealtades cívicas por otras de tipo militar.

Los terratenientes unen el poder socio económico al que proviene de las armas.

Jefes militares y fuerzas bajo su mando se vuelven arbitros finales en los asuntos públicos y participan activamente en las decisiones. Explotan el descontento popular. Son llamados por gobernantes civiles para que los sostengan y terminan por limitarlos o sustituirlos, creando dictaduras militares personalistas.

Desde la segunda mitad del S19, el progreso económico acelerado exige un orden estable y general, por tanto un Estado centralizado que lo imponga y mantenga en todo el territorio nacional. El desarrollo posibilita una alianza estrecha entre terratenientes con la élite urbana. Los militares se subordinan al Estado, convirtiéndose en cuerpo profesional, burocratizado, especializado. Sus principios rectores son por largo período el apoliticismo, la defensa del orden y la identificación con la oligarquía rural urbana, pacificación interna e integración nacional, defensa exterior, apuntalamiento del sistema.


ORGANIZACION COLECTIVA Y
POLITICA ECONOMICA


El Estado actúa sobre la orientación., la estructura y el funcionamiento de la actividad económica y del sistema social, para posibilitar y asegurar la exitosa operación del modelo de crecimiento dependiente.

1. El sector productivo primario-exportador que se hereda de la etapa colonial es mantenido bajo el control local y autónomo de la oligarquía.


2. Se mantiene y expande la disponibilidad de recursos productivos en el sector agro-minero-exportador.

Las comunidades indígenas son en parte exterminadas o desplazadas por la fuerza hacia regiones marginales e inhóspitas, largas jornadas de trabajo. Implica también el acceso a otros "beneficios" de la civilización, como el analfabetismo, el alcohol, la droga, enfermedades antes desconocidas, desprecio racial y clasista, marginación.

El aporte de la mano de obra indígena es insuficiente, y se complementa con otra de origen migratorio (Perú- chinos)

3. El Estado favorece la acumulación interna de capitales y la atracción de recursos externos.

Ferrocarriles, puertos, tranvías, gas, electricidad, teléfonos, etc. son un rubro importante de la inversión extranjera. Los ferrocarriles valorizan tierras de los latifundistas y permiten a estos vender sus productos.

4. El Estado desempeña un papel definitivo en el ordenamiento del territorio y en la urbanización. Las grandes ciudades crecen por su intermediación entre el interior y el mercado mundial.

5. La acción del Estado favorece el desarrollo económico dependiente, reorganiza el sistema financiero, contrae empréstitos, busca atraer capitales. El mantenimiento del buen nombre es una prioridad : todo cuanto se debe será pagado.

Los recursos del Estado provienen de préstamos y de impuestos. Las empresas extranjeras generalmente son eximidas de pago, las deudas son abonables en moneda local, no en oro, lo que por devaluaciones y la necesidad de comprar oro y divisas para pago de deudas hacen que las internas queden casi en lo nominal.



El uso de los recursos fiscales se canaliza hacia:


1. Obras públicas

2. Pago de capital e intereses de los préstamos.

3. Participación del estado como accionista de nuevas empresas privadas.

4. Mantenimiento del aparato burocrático y militar

5. Obras suntuarias no productivas

6. Redistribución del ingreso en favor de las oligarquías y de intereses extranjeros.


La superación de la crisis se busca a través del aumento de la producción, mediante trabajo intensificado con salarios nominales y reales bajos a fin de exportar más barato.

La inflación y la devaluación de la moneda, determinados por el automatismo del patrón oro, déficit en las balanzas comerciales y de pagos, manipulación de la política financiera, producen la transferencia de recursos de los sectores de ingresos fijos (asalariados, pequeños rentistas) a los de ingresos flexibles o móviles (grandes propietarios y empresarios nacionales y extranjeros).

Las pérdidas se socializan, las rentas y beneficios se concentran.


LAS RELACIONES INTERNACIONALES

La política exterior resultante es formulada y ejecutada por el equipo gobernante de la oligarquía, cuya preocupación fundamental en esa área es la intensificación y estrechamiento de las relaciones con las metrópolis, impidiendo que nada interfiera con ellas y tratando de extraerles el máximo provecho. Su instrumento preferido es el tratado bilateral.

Existe un marcado desinterés por todo lo que sea regionalismo.

Desde la emancipación a la balcanización de América se sumaron guerras importantes : Argentina y Brasil, Argentina y Uruguay, Chile y Perú/Bolivia, Chile y Perú y Bolivia.